IA: Herramientas que eliminan barreras

Por: Michelle Jara Barrón, Facultad de Comunicación

Las aplicaciones basadas en inteligencia artificial se han convertido en herramientas fundamentales para mejorar la accesibilidad y autonomía de personas con diferentes tipos de discapacidad. En el ámbito visual, soluciones como Seeing AI permiten reconocer objetos, describir el entorno y leer textos impresos a través de la cámara del dispositivo, lo que facilita tareas cotidianas como orientarse, identificar productos o acceder a información escrita.

Por otro lado, Be My Eyes combina la ayuda de voluntarios con funciones avanzadas de IA para ofrecer asistencia visual en tiempo real, permitiendo a los usuarios leer etiquetas, describir escenas o interpretar elementos del entorno sin apoyo presencial. A estas se suman los tradicionales lectores de pantalla como NVDA o JAWS, que convierten texto en voz o braille y siguen siendo esenciales para la navegación digital.

En el caso de personas con dificultades de comunicación o lenguaje, herramientas como Spoken AAC permiten expresarse mediante símbolos y voz generada, facilitando la interacción social y académica para personas con autismo no verbal, afasias u otras condiciones. También destacan programas como WordQ+SpeakQ, que apoyan el proceso de escritura mediante predicción de palabras y funciones de texto a voz, resultando especialmente útiles para estudiantes con dislexia, disgrafía o movilidad reducida.

Para quienes presentan movilidad limitada, las tecnologías de reconocimiento de voz permiten controlar dispositivos sin necesidad de teclado o mouse, mientras que el control por mirada (eye-tracking) se ha convertido en una opción accesible para usuarios con discapacidad motriz severa, permitiendo manejar computadoras solo con la vista.

Por otra parte, las personas con dificultades cognitivas o de lectura cuentan con aplicaciones de lectura fácil, interfaces simplificadas y funciones de lectura en voz alta, como la app Te Cuento, diseñada especialmente para usuarios con discapacidad intelectual. Además, las herramientas de subtitulado automático y transcripción en tiempo real son un gran apoyo para personas con dificultades auditivas o de procesamiento, especialmente en entornos educativos y videollamadas.

Estas tecnologías no solo eliminan barreras informativas o físicas, sino que también fomentan la inclusión en espacios educativos, laborales y sociales. Ayudan a que los usuarios se desenvuelvan con mayor independencia, accedan a contenidos antes inaccesibles y participen de manera activa en su entorno.

La inteligencia artificial representa una oportunidad significativa para avanzar hacia una sociedad más inclusiva. Aunque todavía existen desafíos relacionados con el idioma, la accesibilidad económica y la privacidad, estas herramientas ya están transformando la vida de muchas personas. Con su evolución constante, es probable que cada vez más soluciones contribuyan a reducir desigualdades y a garantizar que la tecnología sea un puente, y no una barrera, para la plena participación de todos.