Del Día Naranja al cambio real: El poder del podcast en la prevención de la violencia de género
- 2 sept
- 5 Min. de lectura

Por Redacción Landscape
En una sociedad saturada de imágenes, estímulos y discursos, hablar de la violencia de género puede parecer una tarea titánica. ¿Cómo lograr que el mensaje no solo se escuche, sino que transforme? ¿Cómo hacer que el Día Naranja, instaurado por Naciones Unidas para visibilizar la lucha contra la violencia hacia las mujeres, deje de ser una conmemoración simbólica para convertirse en un detonante de cambio real?
Estas son algunas de las preguntas que guiaron la investigación desarrollada por Joanna Nuryth Castillo Silveyra y Daniella Miyar Villalobos, cuyas conclusiones han sido sintetizadas en un cartel científico de gran profundidad y relevancia. Su propuesta no es únicamente crítica, sino propositiva: diseñar un modelo transmedia socialmente responsable, con énfasis en el formato podcast, que permita repensar la manera en la que se comunica la prevención de la violencia hacia las mujeres.
A través de un análisis riguroso de campañas, plataformas y contenidos existentes, así como del estudio de las necesidades de la audiencia, el cartel articula una poderosa reflexión sobre cómo —y desde dónde— se puede transformar la comunicación social vinculada a la violencia de género.
El reto de comunicar la violencia: entre la fatiga simbólica y la urgencia estructural
El primer hallazgo que resalta el cartel es tan incómodo como necesario: las campañas actuales —incluidas muchas relacionadas con el Día Naranja— no logran conectar de forma efectiva con su audiencia objetivo. Aunque bien intencionadas, muchas de estas acciones reproducen fórmulas obsoletas, formatos rígidos y un lenguaje distante. En su intento por informar, pierden la capacidad de tocar, de provocar, de transformar.
La hipótesis comprobada por las autoras señala que la falta de dinamismo, interactividad y conexión emocional con los intereses reales de la audiencia limita el impacto de estas campañas. En especial, se advierte que la radio tradicional —aun con su potencial— resulta insuficiente por su carácter unidireccional y su baja capacidad de participación.
Frente a ello, el podcast emerge como un medio más íntimo, flexible y emocionalmente potente. No se trata solo de un cambio de canal, sino de una reconfiguración completa de la lógica de comunicación: del mensaje vertical y rígido, al relato compartido, cercano y reflexivo.
El podcast como herramienta de transformación
El análisis de contenido realizado en el estudio evidencia que el formato podcast, bien diseñado y con enfoque de género, puede ser una herramienta de alto impacto para la prevención de la violencia de género. ¿Por qué? Porque combina tres elementos clave:
Lenguaje íntimo y emocional: El podcast, al ser escuchado en momentos privados (como al caminar, al transportarse o antes de dormir), permite una conexión directa, casi confidencial, entre la narradora y su audiencia. Este tono facilita la empatía y abre espacio para la autorreflexión.
Narrativas auténticas y testimoniales: Al incorporar historias reales, voces diversas y experiencias vividas, se rompe con el discurso abstracto y se humaniza el problema. La violencia deja de ser una cifra y se vuelve una vivencia cercana, que interpela.
Recursos institucionales útiles: Al articular información con guías, teléfonos de apoyo y herramientas de acción, el contenido no solo sensibiliza, sino que empodera. Brinda rutas de salida y da nombres a las violencias que muchas veces se viven en silencio.
El resultado es una fórmula poderosa: narrativa + empatía + acción. Y eso, en términos de comunicación para el cambio social, es oro puro.
Una teoría para explicar el silencio: la violencia simbólica de Bourdieu
Uno de los marcos teóricos que sustenta la investigación es el concepto de violencia simbólica desarrollado por el sociólogo Pierre Bourdieu. Esta forma de violencia —invisible, sutil, normalizada— se ejerce no con golpes, sino con palabras, miradas, omisiones. Es la violencia que calla, que humilla, que naturaliza el control, que desactiva la resistencia desde dentro.
El podcast, según las autoras, es una vía privilegiada para denunciar y desarticular esta violencia simbólica, ya que permite nombrarla, contarla, compartirla. Al dar voz a mujeres que han vivido experiencias de violencia, se rompe el pacto del silencio. Y al hacerlo desde un formato cercano y accesible, se evita el tono acusatorio o moralizante, promoviendo una reflexión profunda y una identificación emocional.
Más allá de la denuncia: construir comunidad, acción y transformación
Otro de los aportes clave del estudio es su apuesta por un modelo transmedia, es decir, que no se limite al podcast, sino que articule distintos formatos y plataformas para construir una narrativa expandida.
El modelo ideal —según las investigadoras— incluiría:
Podcasts temáticos por tipo de violencia o etapa de vida.
Microvideos en redes sociales que refuercen mensajes clave.
Espacios de conversación y foros seguros para oyentes.
Materiales descargables de prevención, autodiagnóstico y apoyo.
Campañas interactivas ligadas a fechas clave como el Día Naranja o el 25N.
Este enfoque transmedia no solo aumenta el alcance del mensaje, sino que permite generar comunidad, participación activa y un sentido de pertenencia. La audiencia deja de ser receptora pasiva para convertirse en parte del proceso.
Resultados que invitan a actuar
Las conclusiones del cartel son claras y contundentes:
Los podcasts son más efectivos que la radio tradicional para abordar la violencia de género, especialmente entre mujeres jóvenes.
La combinación de narrativas emocionales, datos y recursos útiles permite generar empatía, reflexión y acción concreta.
Las campañas actuales deben reinventarse, incorporando formatos digitales, enfoque de género, y métodos participativos y seguros.
El modelo transmedia propuesto representa una alternativa ética, innovadora y socialmente responsable para comunicar desde lo íntimo hacia lo colectivo.
Estos hallazgos no solo validan una hipótesis, sino que proponen una hoja de ruta concreta para gobiernos, ONGs, medios de comunicación, universidades y colectivos feministas que deseen potenciar su impacto.
Una llamada urgente a transformar la comunicación social
En un contexto donde las violencias machistas persisten, evolucionan y se camuflan, comunicar bien no es un lujo: es una responsabilidad ética. Esta investigación recuerda que la forma importa tanto como el fondo. Que un mensaje puede ser cierto y necesario, pero si no conecta con la audiencia, si no le habla en su idioma, si no respeta sus tiempos y emociones, está condenado al fracaso.
Por eso, esta propuesta de Joanna Nuryth Castillo Silveyra y Daniella Miyar Villalobos no es solo un aporte académico: es un acto político. Es una apuesta por una comunicación que escucha antes de hablar, que acompaña antes de juzgar, que construye antes de imponer.
Invitación a seguir escuchando, pensando, transformando
Desde Landscape, extendemos una invitación abierta a explorar esta investigación en profundidad. Si eres comunicador, docente, activista, estudiante, servidor público o simplemente una persona comprometida con la justicia y la equidad, este cartel científico es para ti.
Te animamos a:
Escuchar podcasts con enfoque de género y analizar sus estructuras.
Repensar tus propias campañas o mensajes desde una lógica transmedia.
Generar contenidos que combinen datos, emoción y acción.
Reflexionar sobre cómo la violencia simbólica habita también en nuestros silencios, en nuestros formatos, en nuestras omisiones.
Porque sí: la comunicación puede salvar vidas. Pero para eso, necesita dejar de hablar sobre las mujeres y comenzar a hablar con ellas. En sus tiempos, con sus voces, desde su experiencia.




Comentarios