Cuando las máquinas sueñan por nosotros: el poder de los algoritmos en la democracia
- 9 mar
- 3 Min. de lectura

Por: Abraham González Montaño, Universidad Nacional Autónoma de México
La democracia, en su esencia, ha sido un sistema construido sobre la pluralidad y el debate. Sin embargo, en la era del capitalismo algorítmico, esa estructura se tambalea ante la incursión de nuevas tecnologías que buscan no solo predecir, sino moldear la voluntad política de los ciudadanos. El caso de Cambridge Analytica demostró que los datos personales, en manos de algoritmos diseñados para influir en la toma de decisiones, pueden ser una herramienta poderosa para reconfigurar la percepción de la realidad y modificar comportamientos de forma casi imperceptible.
El capitalismo algorítmico y su impacto en la política
El concepto de capitalismo algorítmico describe un modelo donde la extracción masiva de datos permite a los sistemas digitales generar perfiles hiperpersonalizados de los individuos. Esto no solo permite predecir sus acciones, sino influenciarlas activamente. Empresas como Cambridge Analytica lograron combinar el análisis de datos con estrategias de microfocalización conductual para intervenir en procesos electorales, como la elección presidencial de 2016 en Estados Unidos y el referéndum del Brexit en el Reino Unido.
Cambridge Analytica operaba en cuatro dimensiones clave:
Extracción masiva de datos, comprando bases de datos o utilizando aplicaciones de Facebook para obtener información sobre los usuarios.
Procesamiento algorítmico, en el que los datos eran analizados para construir perfiles de personalidad basados en modelos psicológicos como OCEAN.
Perfilaje algorítmico, que permitía anticipar preferencias y diseñar estrategias persuasivas.
Cajas de resonancia virtuales, donde los usuarios recibían información altamente segmentada que reforzaba su visión de mundo y su inclinación política.
Esta metodología permitió a Cambridge Analytica sugerir, influir y moldear las decisiones de millones de ciudadanos sin que estos fueran plenamente conscientes del proceso.
La erosión de la pluralidad democrática
El problema fundamental con el uso de algoritmos en política es la eliminación progresiva de la pluralidad. Como señala Wendy Brown (2015), la democracia debe permitir el disenso, el debate y la multiplicidad de voces. Sin embargo, cuando la información se presenta de manera hipersegmentada, los ciudadanos terminan atrapados en burbujas de filtro que refuerzan sus creencias y dificultan el encuentro con visiones alternativas.
Además, los algoritmos construyen una ilusión de libre elección. La arquitectura de plataformas como Facebook, Instagram y Twitter está diseñada para priorizar contenido que valide lo que el usuario ya piensa, lo que en última instancia socava la capacidad crítica y el ejercicio deliberativo de la ciudadanía.
¿Hacia una democracia algorítmica?
La automatización de la política plantea un debate filosófico de gran calado. Algunos casos, como el Partido Sintético en Dinamarca o la candidatura del androide Michihito Matsuda en Tokio, sugieren que los algoritmos podrían gestionar la política de manera más eficiente que los humanos. Sin embargo, este supuesto parte de la idea errónea de que los sistemas algorítmicos son objetivos e imparciales, cuando en realidad reflejan los sesgos de sus programadores y las dinámicas de poder de quienes los controlan.
La democracia requiere pluralidad, confrontación y deliberación, elementos que los sistemas algorítmicos tienden a minimizar en favor de la eficiencia y la previsibilidad. En este sentido, la pregunta clave no es si los algoritmos deberían gobernarnos, sino si estamos dispuestos a permitir que tomen decisiones por nosotros sin que siquiera nos demos cuenta.
La incursión del capitalismo algorítmico en la política nos obliga a repensar los límites entre tecnología y democracia. Si los algoritmos sueñan con nosotros, ¿hasta qué punto esos sueños son realmente nuestros?
Si te interesa profundizar en este estudio, te invitamos a leer el artículo completo en la revista Sintaxis:
👉 Consulta el estudio aquí. https://revistas.anahuac.mx/index.php/sintaxis/article/view/2556/2571
Commentaires